Sábado 19 de mayo / Casa de Cultura de Navacerrada / 20:00h.
Hay personas que cambian la vida de los demás regalándoles parte de la suya. Carmen Aguirre fue una de ellas. Enseñó a amar la música y el piano –durante sus últimos años en Navacerrada– a muchas generaciones de pianistas.
Tras formarse en París y conocer a muchos de los grandes pianistas de la época, su magisterio y su profunda humanidad crearon una auténtica escuela que, tras su desaparición, permanece viva en auditorios, conservatorios y multitud de centros docentes de todo el país.
Este sencillo pero entrañable acto a cargo de algunos de sus ex-alumnos, pianistas, familia y amigos, quiere servir de homenaje a una mujer cuya fortaleza y pasión por la belleza constituye un admirable ejemplo de auténtica maestría.
Grupo de ex alumnos de Carmen Aguirre, amigos y familiares.
Coordina Óscar Arroyo Terrón (Director del Conservatorio Profesional de música de Ávila).