Exposición: “Amarillo”

Es frecuente que las personas que comparten una misma experiencia la recuerden, y la cuenten luego, de manera diferente.
El estilo es el hombre, declaraba sin empacho el Conde de Buffon, como si el ser humano no incluyera también a las mujeres. Pero no sólo la mano, sino también la mirada, es exclusiva de cada individuo, de su carácter, su estado particular, sus experiencias anteriores… Es imposible ver como ven los ojos de otra persona.

La Realidad (de existir semejante cosa) podría parecerse a un caleidoscopio de pequeñas realidades subjetivas, de diferentes colores.
Por otra parte se suele aceptar como atinada la propuesta de que el trabajo artístico consiste, en gran medida, en ofrecerse como filtro inevitable de la realidad, de modo que la obra que se produce sea el resultado de, o quede al menos impregnada con, la esencia de la propia artista. Nadie más hubiera podido hacer una obra como la que ha realizado esa persona. De este modo cada obra sería como una cápsula que contiene un cristal del espíritu de quién la ha producido, que se le ofrece a la espectadora capaz de acercar el ojo al orificio.

Esta propuesta, que es popular, tiene también sus detractores. De ninguna manera afirmo que éste sea el propósito de la creación artística; sólo me aventuro a sugerir que es una posibilidad entre otras varias.
La próxima iniciativa que desea albergar el Proyecto Glocal se basa en las interpretaciones que artistas de distinta trayectoria quieren hacer a partir de una propuesta común.

No entendemos bien cómo funcionan los procesos creativos. Creemos que algunas personas tienen más facilidad que otras para encontrar respuestas nuevas a problemas del orden que sea, y que a veces esas soluciones nos maravillan por su originalidad, elegancia o ingenio. A esas personas las llamamos, con frecuencia, artistas.

El trabajo de los y las artistas suele realizarse al abrigo de su estudio y la mayor parte del público sólo accede al producto final, muchas veces sin llegar a comprender en profundidad aquello que se encuentra delante. En ocasiones preguntamos, tratamos de imaginar, entornamos los ojos… pero, las más de las veces, seguimos sin penetrar esa alquimia secreta.

Para la nueva exposición que vamos a presentar en Proyecto Glocal, hemos querido hacer un experimento: Hemos propuesto a cerca de 50 artistas (de las que 34 han recogido el guante) que partieran de una propuesta temática común, la palabra AMARILLO, y la interpretaran según sus sensibilidades diversas. Probablemente este despliegue tampoco servirá para desvelar completamente los arcanos de la creación artística, pero lo que sí podemos afirmar con rotundidad es que la sala va a quedar brillante y colorida.