Jueves 1 de agosto / Biblioteca. Los Molinos / 20:00h.
En un lugar de alguna parte, no hace mucho tiempo que vivía un escritor de cuyo nombre no hace falta acordarse. Este escritor un día sufrió el peor de los males para los de su oficio: se quedó sin inspiración. Un escritor sin inspiración provoca que los paisajes se borren, que las letras no salgan, que los personajes nacidos de su imaginación se queden a medias de sus aventuras…